Fiat Chrysler Automobiles y Peugeot S.A. han firmado hoy un acuerdo vinculante que facilita la fusión de sus empresas al 50/50 con el fin de consolidarse como 4º fabricante mundial del sector de la automoción por volumen y el 3º por ingresos. De la combinación propuesta surgirá un líder del sector con la capacidad de gestión, los medios, recursos y escala necesarios para capitalizar con éxito las oportunidades que ofrece la nueva era de movilidad sostenible.
Con la combinación de fortaleza financiera y capacidad de la entidad fusionada, esta quedará perfectamente posicionada para ofrecer soluciones de movilidad innovadoras, limpias y sostenibles tanto en entornos de creciente urbanización como en las zonas rurales de todo el mundo. Las ventajas obtenidas por la eficiencia derivada de los mayores volúmenes, así como de la unificación de las cualidades y competencias de las dos empresas, darán paso a una nueva empresa capaz de ofrecer a todos sus clientes productos, tecnologías y servicios de primera, y de responder con mayor agilidad al cambio que se está produciendo en este sector profundamente exigente.
La empresa fusionada obtendrá unas ventas anuales de 8,7 millones de vehículos, ingresos por un valor aproximado de 170.000 millones de euros, unos resultados de explotación superiores a 11.000 millones de euros y un margen operativo del 6,6%, todo ello resultante solamente de la agregación de los resultados de 2018. El potente balance general combinado implica una gran flexibilidad financiera y amplia capacidad de maniobra para la ejecución de planes estratégicos e inversión en nuevas tecnologías a lo largo de todo el ciclo.
La entidad fusionada tendrá una presencia global equilibrada y rentable y una cartera de marcas emblemáticas altamente complementarias que abarcan todos los grandes segmentos, desde turismos de lujo, premium y generalistas, hasta SUV, camionetas y vehículos comerciales ligeros. Esto estará respaldado por la fuerza de FCA en Norteamérica y Latinoamérica, y por la sólida posición de Groupe PSA en Europa. El nuevo Grupo tendrá mucho más equilibrio geográfico, ya que el 46% de los ingresos provendrá de Europa y el 43% de Norteamérica, según los datos agregados de cada empresa en 2018. La combinación ofrecerá a la nueva empresa la oportunidad de remodelar la estrategia en otras regiones.
La eficiencia generada por la optimización de las inversiones en plataformas de vehículos, gamas de motores y nuevas tecnologías, así como el aprovechamiento del aumento de escala, permitirán a la empresa ampliar su capacidad de compra y generar valor añadido para los accionistas. Más de dos tercios de los volúmenes se concentrarán en 2 plataformas, con unos 3 millones de vehículos anuales en cada una, la plataforma pequeña y la plataforma compacta / mediana.
Se prevé que esa tecnología y los ahorros relativos a los productos y a las plataformas aporten aproximadamente el 40% de los 3.700 millones de euros de ingresos anualizados generados por las sinergias, en tanto que las compras, que se beneficiarán principalmente de la escala y de la obtención de mejores precios, representen otro 40% estimado de las sinergias. Otros aspectos, como el marketing, los bienes inmuebles, las tecnologías de información y digital, gastos generales y logística, generarán en torno al 20% restante. Estas estimaciones de las sinergias no se basan en el cierre de ninguna planta a causa de la transacción. Se prevé que las sinergias estimadas generen un flujo de caja neto positivo desde el primer año y que aproximadamente el 80% de las sinergias se materialicen en el cuarto año. Se calcula que el gasto no periódico para lograr las sinergias ascienda a 2.800 millones de euros.
Esas sinergias permitirán a la empresa resultante realizar inversiones significativas en las tecnologías y servicios que transformarán la movilidad del futuro y afrontar con éxito las exigentes normas globales sobre CO2. Con una presencia mundial de I+D que ya es de gran relevancia, la entidad combinada contará con una sólida plataforma para fomentar la innovación y ampliar el desarrollo de la capacidad de transformación en vehículos de nuevas energías, movilidad sostenible, conducción autónoma y conectividad.
La entidad fusionada se beneficiará de una eficiente estructura administrativa diseñada para promover un rendimiento eficaz, con un Consejo formado por 11 miembros, en su mayoría independientes. Cinco miembros del Consejo de Administración serán designados por FCA y su accionista de referencia (incluido John Elkann como presidente) y cinco serán nombrados por Groupe PSA (incluido el vicepresidente y el director principal no ejecutivo). Además, al cierre el Consejo incluirá dos miembros en representación de los empleados de FCA y Groupe PSA. El consejero delegado será Carlos Tavares por un periodo inicial de cinco años y también formará parte del Consejo de Administración.
Carlos Tavares, Mike Manley y sus equipos ejecutivos tienen una excelente trayectoria reciente en la conversión de empresas y la combinación de diversos fabricantes con distintas culturas. Esa experiencia impulsará la velocidad de ejecución de la fusión, respaldada por los buenos resultados recientes de las empresas y unos balances generales ya de por sí robustos. La entidad fusionada maniobrará con agilidad y eficiencia en una industria automotriz sometida a cambios rápidos y profundos.
La nueva compañía matriz con domicilio en Países Bajos cotizará en la Euronext (París), la Bolsa de Valores italiana (Milán) y la Bolsa de Valores de Nueva York, y disfrutará de una presencia importante en Francia, Italia y Estados Unidos.
Según los estatutos propuestos para la empresa resultante de la fusión, ningún accionista tendrá capacidad para ejercer más del 30% de los votos emitidos en las reuniones de accionistas. También se prevé que no se transferirán los derechos de doble voto existentes, sino que se acumularán los nuevos derechos de doble voto después de un período de tenencia de tres años tras la conclusión de la fusión.