Bentley Mulsanne 6.75 Edition: adios al mítico V8
Bentley anuncia el fin de la producción de su buque insignia, la gran berlina Mulsanne. Esta gran limusina es el último vestigio del lado más clásico de la marca ya que aún equipa el viejo motor V8 de origen Rolls Royce que data de 1959. Precisamente, la última serie que se fabricará de este coche lleva por nombre ‘6.75 edition’, precisamente en conmemoración de la cilindrada del célebre motor, 6.750 cc.
Sólo se van a fabricar un total de 30 unidades del Mulsanne ‘6.75 Edition’, todas realizadas por la división Mulliner, el departamento de Bentley encargado de sus modelos más especiales. HJ Mulliner fue un carnicero independiente que pasó a ser propiedad de Rolls Royce y Bentley y se encargó de la realización de sus modelos más exclusivos.
El Mulsanne, una denominación histórica en la marca Bentley que data de la década de los 80, concretamente del primer modelo de la marca en emplear un motor turbo, toma su nombre de una parte del circuito de Le Mans, donde Bentley ha cosechado varias victorias.
Su producción está previsto que llegue a su fin en primavera del presente año 2020 y su lugar lo ocupará el Flying Spur, versión berlina del coupé Continental.
El V8 más longevo
Esta serie final del Mulsanne viene equipada con una versión de 530 CV del célebre y vetusto motor V8 de 6.750 cc. Este motor fue estrenado por primera vez en el Rolls Royce Phantom V en 1959 y entonces cubicaba 6.230 cc. El primer Bentley en equiparlo fue el S2, la versión Bentley del Rolls Royce Silver Cloud II. A partir de 1970 el motor V8 empezó a cubicar los actuales 6.750 cc y se ha mantenido así hasta la actualidad. Esta mecánica pasó a ser propiedad de Bentley cuando a principios de la década de los 2000 Rolls y Bentley separaron sus caminos tras ser adquiridas por BMW y Volkswagen respectivamente. Estamos hablando del motor V8 más longevo que hay actualmente en el mercado del automóvil.
Color y un equipamiento interior y exterior exclusivo distinguen al Mulsanne 6.75 del resto. Sin duda, un futuro clásico.