Análisis

Por Lluís Zúñiga

En 2020, los medios de comunicación del círculo privado, publicaron muchos titulares en favor de Forcada y Morbidelli cuando estos habían acertado la puesta a punto de la M1 y habían podido gestionar mejor los neumáticos. Y en cambio, cuando los oficiales no estaban tan acertados, sobre todo en el caso de Viñales, eran criticados y se ponía en duda su capacidad y la del propio equipo. Parecía que se había generado una especie de “causa” en favor de Forcada, después de ser “apartado” del equipo oficial por demanda personal de Viñales. Incluso hubo titulares diciendo que Morbidelli ganaba con piezas que Viñales había descartado. O peor aún, se culpó a Viñales del error de los frenos, cuando se tuvo que tirar de la moto porque se rompieron. Maverick tomó esa decisión porque estaba encima de la mesa, y a nadie se le ocurrió escribir, con sentido común, que lo que tenía que haber hecho Brembo era prescindir de esa opción si no daba garantías. O sea, que le cargaron el muerto a Maverick.

En el caso de Viñales yo creo que algunos incluso traspasaron líneas rojas, y según parece, alguno de estos periodistas se ha tenido que enfrentar a algún veto, o, si por contrato han de ser al final atendidos, como el resto de periodistas acreditados, a no ser bien recibidos en ese lado de box. Sólo han pasado dos GGPP, y es pronto para hacer ningún análisis, y sobre todo, para empezar a repartir “zaskas” en las RRSS. Pero lo que sí está claro es que, los malos resultados del equipo Petronas en los dos GGPP de Qatar, han sido muy bien “tratados” por parte de los medios de comunicación del círculo.Pero es que de la misma manera que no se puede sacar pecho por los buenos resultados y rendimiento de 2 de las 3 motos oficiales, las del equipo Monster Energy Yamaha, más que nada porque llevan allí 5 días de test y 2 GGPP consecutivos y faltará ver qué hacen cuando tengan que improvisar, sí que se podría ser, a día de hoy, críticos con los Petronas, Forcada y Morbidelli, o Rossi y Muñoz, por no haber podido resolver sus problemas con tantos días para hacerlo.

De momento, los datos a día de hoy, y a la espera de ver qué pasa en otros escenarios en los que se tenga que improvisar más, el Monster Energy Yamaha araña primero, con el morbo añadido de hacerlo de una manera tan contundente y coincidiendo además con la salida de Rossi de ese entorno. Hasta 2020, por contrato, Rossi era el piloto que decidía cómo se evolucionaba la M1, y ese 2021 esa responsabilidad recae en Viñales. En menos de 15 días estaremos pendientes de cómo empiezan a trabajar estos dos equipos en Portimao, y sobre todo, cómo acaba todo el domingo. De momento allí, en ese comprometido trazado portugués, Morbidelli estuvo mucho más acertado que los oficiales el año pasado

Por Lluís Zúñiga

Esta vez carrera en grupo, muchos adelantamientos, muchos contactos y como no, mucha polémica. En las RRSS no se deja de comentar todo lo sucedido en Qatar, denominado esta vez GP de Doha, y hay versiones para todos los gustos. Desde la legitimidad que se le otorga a unos para impactar al contrario, hasta el rechazo y la criminalización hacia otros por hacer básicamente lo mismo. Pero además de la polémica, también hay diferentes maneras de analizar lo sucedido. Los titulares idolatrando a Jorge Martín abundan, y es que el recién llegado a MotoGP, cuando tan solo habían pasado cerca de 30 días desde que se subió por primera vez a esta moto, ya deleitaba a los suyos con una Pole, un podio, y con un liderazgo de hasta 18 vueltas de carrera.

Pero vamos a analizarlo más detenidamente.

Ducati, el juego de la silla.

Algunos se han “ofendido” al utilizar la palabra “tapón” para analizar lo que ha ocurrido hoy con Ducati. Y es que las 4 motos de Borgo Panigale han sacado de quicio a todos los que se han añadido al grupo, salvándose solo, y in-extremis, Fabio Quartararo. Martín y Zarco, después de tomar el liderazgo de la carrera desde la misma salida, abortaron los ritmos que tenían las Yamaha y las Suzuki. Tener un ritmo de 4 décimas de segundo mejor que el resto, en MotoGP, es un mundo. Pero en Qatar, por las características del circuito, y por su larga recta, las Ducati, rodando en grupo y adelantando a todos en las rectas, pueden provocar que los más rápidos tengan que ver como esas décimas se esfuman, viéndose frenados en las partes reviradas del trazado.

Pero es que no fueron una ni dos. Fueron hasta cuatro las Ducati que le amargaron la vida a Viñales, Quartararo, Rins y Mir. Se formó un grupo de 10 pilotos, con Viñales a la cola por una mala salida, en el que si se te ocurría pasar a alguien en la zona mixta, en la recta te pasaba una o dos Ducati. Hablo del juego de la Silla porque, una vez visto como transcurrió la carrera, quien se posicionase delante en la primera vuelta, ya tenía mucho trabajo hecho.

Y Martín así lo hizo, y también. Igual hicieron Zarco y Rins, que se mantuvo toda la carrera luchando entre la P4 y P2, contra tres GP1. Y poco se podía hacer, solo Quartararo, que siempre se mantuvo más arriba que Viñales, consiguió unas décimas de ventaja antes de la recta, lo que le condujo directamente a la victoria, de la misma manera que lo hizo Viñales siete días antes.

Ducati hizo un tapón considerable, provocando casi que quien quisiera hacer trampas en el juego de la silla, dicho de otra manera, adelantar al rival, se metiese en serios problemas. Joan Mir tuvo que apartar literalmente a Miller hasta en tres ocasiones, eso sí, sin que nadie pusiese en duda sus impactos y sus maneras. Pero eso sí, cuando Mir impactó con Miller al volver a pista después de irse un poco largo, a todos les faltó tiempo para criminalizar al australiano. La acción no queda demasiado clara en las imágenes de DAZN, bien podría haber sido una temeridad de Jack, pero al no ser sancionado por dirección de carrera, la duda queda ahí, en si era la primera de Miller, o la cuarta de Mir.

Al final Zarco, tirando de madurez, pasó a Martín para entrar 2° por línea de meta, tomado a su vez el liderato de MotoGP, mientras que Martín, en una demostración de control total de la situación, haciendo cero fallos, se defendió perfectamente de los ataques de las Suzuki, cediendo solo ante Quartararo y al final, ante su compañero.

La carrera de MotoGP no fue muy diferente a las que solemos ver en Moto3, solo que allí el tapón lo hacen los propios pilotos al adelantarse, y aquí lo hacen, claramente las Ducati. La superioridad de motor es tan descarada que hasta cuesta creer que las Yamaha y Suzuki sigan pensando en un futuro mantener sus motores de cuatro cilindros en línea.

Yamaha, este año parece que si.

Es una lástima este problema con las Ducati. Un problema que empieza desde la misma línea  de salida y que, una vez cedidos algunos metros, si además tienes ahí hasta 4 Ducati, te puede pasar factura. Y digo que es una pena porque este año Yamaha es claramente la moto más equilibrada, por lo menos en los dos GGPP de Qatar. Incluso su gran salida de curva, gracias al grip que han sabido generar con la moto inclinada, ha hecho que hasta el problema de motor parezca menos de lo que es.

Lo de las dos Yamaha de ayer fue, a pesar de la P5 de Viñales, todo un recital de puesta a punto y de buen hacer tanto de los pilotos, como de sus técnicos. Aunque muchos están esperando que Morbidelli haga una buena carrera para hablar de este tema, para idolatrar a su amigo Ramón, y a su vez, al italiano. Que es lo que pasó durante todo 2021.

Viñales pagó cara una mala salida, pero también, además  de pasar por meta en P11, le costó algo más de la cuenta superar a sus rivales. Quartararo, que se mantuvo delante suyo muchas vueltas, pudo ir superando mejor a los pilotos que tenía delante, mientras Viñales se quedó algo más estancado en el grupo. Yamaha está viviendo un arranque de año espectacular. Y cuando hablo de Yamaha lo hago concretamente del equipo oficial, porque en el Petronas, de momento, está pasando todo lo contrario. Ya el pasado domingo tuvimos que ver un claro blanqueamiento a Forcada y Morbidelli, quienes después de no superar los problemas en su M1 cuando bajaba la temperatura, dejando  de ser competitivos caída la noche, vimos como toda la prensa se centró en un problema técnico, relacionado con el sistema de salida, el HoleShot. Pero pasados 7 días los problemas han seguido ahí, y ya en horario nocturno, Morbidelli y su M1, dejaban de ser competitivos.

Y si los problemas en un lado de ese box han arruinado el doble GP de Qatar, lo del otro lado ya es más que preocupante. Rossi, a la desesperada, se fue a copiar los settings de los oficiales, concretamente los de Viñales, y lo que hizo fue empeorar. Rossi dejó una triste estampa justo la semana en la que se debatía si merecía la pena seguir o retirarse; 21º en parrilla, dicho de otra manera, penúltimo, y 16º en carrera, cero puntos.

Rins reivindica el liderazgo en Suzuki

Àlex Rins dio también un gran recital ayer. Muchos no lo saben ver así, porque al final entró 4º, pero es que si vemos cómo acabó su compañero de equipo, Joan Mir, es justo destacar el papel del de Barcelona en este segundo GP de Qatar. Las Suzuki aún estaban en más desventaja que las Yamaha, al no tener tanto grip en mitad de curva y tanta velocidad también en la salida de curva, sus intentos en mantener la posición en recta ante las Ducati, fue una más que evidente misión imposible. Joan Mir Intentó en varias ocasiones adelantar lo antes posible para buscar algo de hueco antes de la recta, pero esta vez de manera desafortunada, al no poder hacerlo limpiamente y tener que recurrir al contacto.

Hasta 3 veces apartó a Miller, llegando a desesperar al australiano, protagonizando más tarde una de las imágenes del campeonato. Joan se fue largo en una curva, y al volver a entrar se encontró la Ducati de Miller, que viendo que la Suzuki se había ido algo largo, se apresuró en ganar esa posición, incluso se preparó para el impacto de Mir, lo que algunos   opinan que fue ir a impactar a Mir. En la imagen en directo no se puede ver del todo claro, pero si Miller al final lo que hizo fue ocupar el sitio en pista que Mir dejó libre al salirse, quien debería haber cortado o modificado su línea al entrar debió ser Mir.

Y mientras Mir se mostraba tan impotente en ese grupo controlado por las Ducati, Rins no dejaba de adelantar una y otra vez a Zarco, a Bagnaia, y a deshacerse rápidamente de los que no eran Ducati, como Aleix Espargaró. Una gran exhibición de pilotaje que repito una vez más, se vio abortada por la potencia de las Ducati en recta.

Àlex Rins, a pesar de pasarse toda la carrera intentándolo, pudo llegar con las gomas en buenas condiciones para plantar cara a un Viñales que venía lanzado desde atrás a ocupar la segunda posición de podio. Si en el primer GP del año muchos dijeron que Mir se había consolidado como piloto número uno de Suzuki, esta vez deberían rectificar y señalar a Rins como al piloto que va a hacer todo lo posible para recupera esa etiqueta.

Binder paso adelante, Honda ni un paso más

En el nutrido grupo de hasta 11 pilotos pudimos ver una vez más a Aleix Espargaró, demostrando que su Aprilia, atención… está a un nivel superior a las Suzuki y casi emparejada a las Yamaha.  Aleix, a pesar de ir esta vez al 100%, acabó 10º, más retrasado que hace tan solo 7 días, 7º, cuando declaró haber ido solo al 70%. Y es que Binder, que esta vez eligió junto a todo el grupo KTM la goma M delantera (toda la parrilla usó S/S) demostró haber dado un paso adelante, llegando a escalar hasta la 8ª posición, superando al propio Aleix, y a Miller, en la última vuelta.

Una posición que bien podría haber corrido peligro si Pol Espargaró, una vez más punta de lanza en Honda, no se hubiese ido largo al llegar al grupo liderado y condicionado por Martín y Zarco. Las sensaciones de Pol en el test fueron buenas, pero una vez enterados en materia, en modo carrera, los problemas de Pol en Honda son los mismos que han sufrido todos y cada uno de los pilotos que se han subido a ella y que no se llaman Marc Márquez, Casey Stoner, o Dani Pedrosa.

Debe ser todo un poema la cara de Aleix cuando ve delante de él a Binder y Oliveira, y peor aún, a Àlex Márquez pisarle los talones.

Los dos GP celebrados en Qatar nos han traído más estabilidad que en 2020. Aquí más o menos los que han sido fuertes, lo han sido los dos días, y los que han demostrado debilidades, también lo han hecho los dos días. Pero la noticia positiva, más allá de la tan necesitada regularidad en pisa, yo creo que sigue siendo Yamaha. En muy pocos días, en Portimao, podríamos ver a Marc de vuelta a los GGPP, y ver si realmente, la mejor M1, ahora sí, con su gran paso de curva intacto, y sin sufrir bajones de rendimiento a partir de la vuelta 10, es el antídoto necesario para hacer que Marc Márquez no lo siga ganando todo.

Por Lluís Zúñiga

El grado de satisfacción conseguido en el primer Gran Premio del año ha sido más que notable. Sobre todo porque, además del espectáculo e intensidad que se vio en la carrera, para muchos, menos en el caso de Morbidelli, se cumplieron más o menos los pronósticos. Y eso también ayuda a que crezca ese grado de satisfacción, porque cuando pasan cosas que nadie se espera y, más preocupante aún, carecen de una explicación lógica, uno llega a desesperarse y a acabar como Neo en Matrix, viviendo con la extraña sensación de que algo no funciona, pero sin llegar a saber nunca el qué, ni el por qué.

Y si para el pasado GP de Qatar, los test previos ayudaron a que todo se desarrollase en plena normalidad, ¿qué podemos esperar de este segundo asalto?… Pues vamos a analizarlo.

Empezamos con Suzuki

La guerra en ese box, la batalla por el liderazgo de la marca, es para mí una de las atracciones del año. Y Rins bien consciente era de ello, pero en ese primer intento  por querer “arrasar” en su box, saliendo con un ritmo infernal al principio de carrera para empezar ya a marcar territorio, salió más que perdedor. Mir le contestó con otro final de carrera más solido, jugándose la P2 hasta casi la misma línea de meta, y enviándole un claro mensaje a Rins; el número 1 lo llevo yo.

Habrá que estar muy atentos a ver qué táctica utiliza Rins en Qatar2. Su mejor potencial con goma nueva le permite imponer al inicio de carrera un ritmo que Mir no tiene, pero que después, como vimos el domingo pasado, le puede pasar factura. En este caso, y esta es una de las cosas extrañas que suceden en este mundial, la falta de velocidad con gomas nuevas que sufre Mir no le ha perjudicado, al contrario, de momento le ha beneficiado.

Aunque también hay que destacar el potencial de Mir a la hora de adelantar. Mientras Rins se queda muchas veces estancado detrás de sus rivales, Mir llega y los pasa. Y eso, para los neumáticos, si cambias el tipo de pilotaje, puede ser también muy perjudicial.

Lo que pase en Suzuki, sin lugar a dudas, va a ser una de las atracciones del fin de semana, y, por el bien del campeonato, esperemos que Rins nos conteste este domingo con una nueva táctica de carrera.

Yamaha, a confirmar

Es estupendo ver a todos los entendidos en la materia ignorar a Viñales en sus apuestas, incluso el mismísimo Jorge Lorenzo ni le puso en el podio, prefirió poner a Morbidelli y Quartararo. Pero Viñales arrasó. Y lo hizo porque todo le funcionó a la perfección, coincidiendo además, fíjate tú qué ironía, con los problemas en el box de Petronas. Con el historial de problemas de Viñales todos siguen siendo prudentes. Y es que es mejor esperar a ver si esa regularidad se mantiene en Qatar2, y si es así, ya se podría empezar a cocinar uno de los mayores zaskas de la historia.

Recordemos la situación en Yamaha. Forcada con Morbidelli atribuyéndose los méritos de la puesta a punto de la M1 2019, Rossi saliendo del equipo oficial y dejando plena libertad a Viñales y Quartararo… Si este año fuese el año Viñales, no os separéis de este blog, porque el zaska para muchos, va a ser monumental. Pero mejor esperar, Qatar 2 nos traerá una dosis mucho más precisa del potencial real de Yamaha.

Ducati, ligeramente lastrada

Sí. Creo que esta nueva carcasa ha sido crucial para que Ducati deje de avasallar, por lo menos tanto, a sus rivales en las rectas. A pesar de que todos os quedásteis con los 362km/h de Zarco, o con la imagen de Mir siendo superado por las Ducati antes de la linea de meta, en toda la carrera, a Ducati le costó más de la cuenta superar a algunos pilotos que tenía delante en la recta.

Con este mayor apoyo en curva, obligando a las motos a permanecer más tiempo inclinadas y redondeando más las curvas, Ducati ha perdido, poco, pero ha perdido, algo de “explosividad”. Si el rival abre gas antes que ellos, y ellos sufren un poco con el grip, en muchas ocasiones ya no les da tiempo a adelantarles en la larga recta. Y es por eso que, una vez visto el “fiasco de Dovi” en 2020, pasando de ser un habitual favorito a la victoria en cada GP, a tener problemas para entrar en el Top10, Ducati sigue trabajando para mejorar el giro de la GP21. Una moto más larga (ahora sí, confirmado por Jorge Lorenzo) a la que en general le ha perjudicado más de la cuenta esa nueva carcasa de Michelin introducida en 2020.

Ahora, con Dovi fuera del equipo, Ducati necesita adaptarse a Bagnaia y Miller, pilotos más compatibles con esta nueva carcasa y que están a la espera de que Ducati les ayude en el giro en mitad de curva. Y cuando sea así, pues entonces yo creo que sí que de verdad deberán a empezar a preocuparse, y bastante, todos sus rivales.

KTM, a pasar el mal rato

Lo de KTM ha sido totalmente inesperado. Pero de momento toca cogerse al efecto Qatar, un argumento que concretamente dice, “no es un circuito para ellos”. Ha sido preocupante ver el rendimiento de las KTM, incluso deprimente para Oliveira ver delante suyo a Pol Espargaró. Aún así, las críticas a las motos naranjas, y a las aportaciones de Dani Pedrosa, hay que dejarlas para próximos GGPP.

Honda, todo sigue igual

Si la carrera es rápida, Honda sufre. Incluso es una tendencia que se repite con Márquez, con Marc, pero obviamente mucho menos acentuada que con el resto de pilotos. Cuando la pista y las gomas permiten ir rápido, a la Honda le falta un pasito. Y cuando el piloto lo quiere dar, acaba en el suelo. Perdiendo además mucha confianza.

Que la carrera de ralentizase tanto, ayudó, sin lugar a dudas, a Pol Espargaró. Y es por eso que para saber qué podemos esperar de las Honda, habrá que ver cómo están sus rivales. Si consiguen  marcar un ritmo alto, sin que las gomas se vengan tan abajo, en principio a Honda le va a seguir costando. De momento hay que seguir con el contador de caídas, que entre Pol, Nakagami y Àlex, ya llevan unas cuantas.

Aprilia, la nueva sensación

O quizá la sensación sea Aleix Espargaró, porque viendo el resultado de su compañero Savadori, uno se plantea muchas cosas. El caso es que, en términos generales, no estuvo mal la carrera de Aleix, y ese bajón de los neumáticos que sufrieron los más rápidos, al igual que beneficiaron a Mir y Pol, también, le beneficiaron a él.

Será muy interesante ver el rendimiento de Aleix y su Aprilia en Qatar2, porque su caso es muy diferente al del resto de pilotos. Mientras muchos demostraron sufrir en algunos puntos, sobre todo Morbidelli y Rossi, pero también los que acabaron delate de él, a Aleix parece que todo le fue casi perfecto, y es por eso que la pregunta de cara al domingo es ¿Vimos ya al mejor Aleix y a la mejor Aprilia en Qatar1, o podemos esperar más?

El próximo domingo, teóricamente, será el último que veremos un GP sin la presencia de Marc. Incluso algunos son optimistas, y piensan que una vez reciba la segunda vacuna… como ya está en Qatar y sigue evolucionando bien… ¿os lo imagináis?

En el peor de los casos, falta muy poco para que reaparezca Marc Márquez, y una vez pise pista, y empiece a aparecer en los FP1 liderando con un segundo de margen, como suele hacer siempre, habrá que ver cómo se altera todo lo que hemos ido analizando hasta ahora.

Por Lluís Zúñiga

Aún es pronto para hacer análisis concretos, y sobre todo, para empezar a repartir zaskas a diestro y siniestro. Primero porque los damnificados en este GP de Qatar, los mismos que fueron idolatrados en 2020, Morbidelli y Forcada, aún (escrito el domingo tras la carrera) no han hecho declaraciones. Según me comentan por privado, alguien esta muy cabreado en ese box por haberse quedado clavado el holeshot de la moto de Morbidelli. Y también, mejor esperar a lanzar el zaska fácil “Rossi se ha llevado los problemas de Yamaha al equipo Petronas”, porque todo esto podría dar un giro de 180° en el próximo GP, que es tan solo dentro de 7 días.

La irregularidad en MotoGP puede volver a ser la protagonista en 2021, no hay que guiarse demasiado por lo que hemos visto en este arranque de campeonato porque una vez más, la gestión de los neumáticos, ha sido clave.

Está claro que quien mejor ha hecho funcionar las gomas ha sido Viñales. Desde su propio Box me comentan que la diferencia con años anteriores ha sido poder trabajar de manera diferente.  Algo que coincide con la salida de Rossi del equipo oficial, y por lo tanto, con la libertad casi total de Viñales para hacer lo que crea oportuno en su M1.

Lo que ha hecho hoy el piloto de Roses ha sido un auténtico recital. En un GP marcado por el desgaste de las gomas, y del bajón importante de ritmo, y dejadme añadir, aún sufriendo a principio de carrera detrás de las Ducati, a pesar de todo eso, Viñales ha sorprendido a todos pasando de ser quien más penalizaba por el bajón de rendimiento de Michelin, a ser con diferencia, quién mejor lo ha gestionado.

Y es que la carrera ha estado marcada por un preocupante bajón de ritmo a partir de la vuelta 10. Algo que llevo avisando desde hace meses, y que obviamente penaliza más a aquellos que han tirado fuerte al principio. Por eso, y vuelvo a insistir, es realmente sorprendente lo que ha hecho hoy Viñales.

Las Ducati, una vez Bagnaia se dio cuenta de que, o bajaba el ritmo o no llegaba a final de carrera, hicieron un tapón importante. Frenaron a Rins, que venía con un ritmo parecido al de Viñales, hicieron que llegase Mir, y que no se descolgase tanto Quartararo. Incluso Ernest Riveras saltó de su silla al ver que Aleix Espargaró, que ya se empezó a ir hacia atrás desde la primera vuelta, volvía a coger aire y se acercaba otra vez al cada vez más lento grupo delantero.

Y quiero que tengáis todos en cuenta un dato importante, la vuelta rápida de Mir ha sido medio segundo más lenta que la de Viñales, algo que en situaciones normales, con unas gomas con rendimiento más constante, no te permitiría nunca luchar por el podio.

Con toda esta difícil gestión de los neumáticos, los que mucho tiraron al principio y no tenían los caballos que tiene Ducati para defenderse, o sea, Rins y Quartararo, se fueron hacia atrás, mientras que Mir, con un pobre ritmo de 55 bajos, no sufrió ningún tipo de bajón en sus neumáticos y consiguió jugarse el podio hasta el final con las dos Ducati, la de Zarco y la de Bagnaia.

Al final, y por haber forzado para adelantar a Zarco y ponerse segundo, al entrar sin tanta velocidad en el último ángulo antes de meta, se vio fulminado, literalmente, por las dos flamantes GP21.

Sé que muchos han celebrado estos resultados de manera efusiva, y los periodistas del círculo privado no han tardado en darle ya a Viñales un trato de campeón del mundo en potencia, cuando hace tan solo unos meses le decían que su problema estaba en la cabeza. Por cierto, cero análisis del trabajo que ha hecho el de Roses para mejorar como lo ha hecho en este primer GP. Para ellos es más fácil decir que ahora se le ve más concentrado… Pero como decía, es mejor dejarse de celebraciones, de zaskas fáciles y esperar a ver qué táctica utilizan aquellos que se han equivocado ayer en Qatar, que no son otros que Rins, Quartararo, Morbidelli, y, como no, las Ducati.

Y para terminar este primer post GP de 2021, lo voy a hacer hablando de Pol Espargaró y de Honda, y en la misma línea que lo llevo haciendo en este texto. 

Pol nunca tuvo un ritmo alto en este GP, algo que yo creo que de momento les debe preocupar. Cuando ha intentado bajar esas décimas necesarias para estar con el grupo delantero, siempre se ha ido al suelo. Y ese es precisamente el problema de todos los “Honda”, incluso de Marc en entrenos. Que se caen mucho cuando buscan el limite.

Ayer Pol acabó con un buen resultado, y con mejores sensaciones a final de carrera. Pero como decía, por lo menos hoy, ha sido más porque han penalizado más los de delante, sufriendo el bajón de los neumáticos, que los que venían por detrás. Como Pol y su hermano Aleix.

En tan solo 7 días podremos salir de dudas. Veremos si los que hoy han estado acertados, lo siguen estando, y si los que se han visto afectados por ese desgaste de los neumáticos, utilizan otra táctica.

Aquí estaremos para contarlo.