UN COCHE DE LEYENDA

El Range Rover fue presentado en sociedad en 1970 y ese mismo año una unidad fue exhibida en el Museo del Louvre de París cuyo patronato le otorgó el premio como ‘Trabajo Ejemplar de Diseño Industrial’. Y es que esta mención viene a reconocer algo muy evidente: el lanzamiento del Range Rover marca un antes y un después en la historia de la automoción en general y en la de los vehículos todoterreno en particular. El Range Rover era más grande y espacioso que un Land Rover. Si bien el interior de las primeras versiones no puede calificarse como lujoso, sí era muy completo, con materiales de calidad y muy confortable. Este tipo de automóvil era absolutamente inédito en Europa y, por concepto, lo más que se le parecía eran autos americanos como el Jeep Wagoneer, el Ford Bronco o el International Harvester Scout, aparecidos unos años antes pero con una difusión testimonial en el Viejo Continente. Inmediatamente se reveló como un excelente vehículo para cualquier tipo de terreno con la ventajas de su cómodo y confortable interior en clara diferencia con su hermano el Land Rover. Además, gracias a su motor V8 de gasolina el Range Rover se desenvolvía a la perfección en la carretera, pudiendo alcanzar cruceros de hasta 160 Km/H. Nació una leyenda.

Cicuenta años después llega la 5ª generación del rey de los SUV y el nuevo Ranger Rover sigue impresionando a primera vista cuando lo vemos por primera vez, en nuestra visita a las instalaciones de Fiol Roca, concesionario oficial de Land Rover en Sevilla. Ha crecido un poco más en anchura y  en largura aunque mantiene la misma altura que la generación anterior, y crece también en su despliegue interior de lujo, materiales y refinamiento.

DISEÑO EXTERIOR

Se ve a primera vista que estamos ante el amo y señor de los SUV, se nota y se siente el ADN Ranger Rover, si bien hay detalles como los faros y la rejilla delantera que han sido estilizados acorde con el diseño general de líneas horizontales  de estilo minimalista. Igualmente la parte más baja del morro se ha diseñado con acierto para integrar todos los sensores y la cámara de los controles de seguridad y conducción sin alterar la figura del coche.

Si ya era todo un tanque, ahora lo es más, sobrepasando los 5 metros en todas sus variantes. Concretamente mide 5,05 mts de largo (chasis corto SWB) por 2,05 mts de ancho. En el caso de la versión alargada LWB, la longitud se va hasta los 5,25 metros con batalla entre ejes de 3,20 metros… Pura desmesura opulenta que en ninguna de sus versiones 2022 baja de las 2,5 toneladas.

El general el vehículo se ve casi como si fuera de una pieza, la carrocería está perfectamente ensamblada con los cristales y la caída del techo perfectamente difuminada con los pilares traseros, marca de la casa para dar la sensación de techo flotante. Las líneas horizontales laterales del nuevo Ranger Rover le aportan elegancia y robustez a partes iguales. En global el nuevo SUV inglés arroja un coeficiente aerodinámico excelente de 0,30 Cx (12% más que la generación anterior que ayuda mucho a reducir consumos en carretera y aumentar la seguridad en velocidades elevadas.

La parte de la zaga es la que se lleva los mayores cambios con unos pilotos traseros horizontales, muy largos y muy bien integrados con el detalle horizontal donde lleva el nombre de Ranger Rover y que es donde se presentan los intermitentes, aumentando la sensación de rotundidad del diseño en general. Una solución que nos gusta mucho para hacer que no sobresalga nada en la parte posterior.

LUJO Y CONFORT A RAUDALES

Máximo lujo interior con opciones de configuración múltiples y más que vendrán en el futuro firmadas por el departamento SVO (sección que se encarga las personalización de lujo y tecnológicas de Ranger Rover). Todo en el nuevo Ranger Rover es piel, maderas nobles y aluminios de la más alta calidad, con una sensación de acabados de máximo lujo.

En lo que a la conectividad se refiere, el nuevo Range Rover controla casi la totalidad de sus funciones con una pantalla táctil de 13,1 pulgadas situada en la consola central (pantalla ligeramente curvada para ir en sintonía con la forma del salpicadero) y se gestiona con el asistente de voz Alexa de Amazon, siendo compatible con Apple Car o Google Play. No hemos podido probarlo en carretera, pero esperamos que se comporte igual de bien que el MBUX de Mercedes-Benz, la referencia de los sistemas actuales de control por voz inteligente… 

De las cosas que más nos gustan, tecnológicamente del nuevo Ranger Rover, es su sistema de conducción predictiva del coche, que controla es estado de la carretera (en conexión incluso con la geolocalización) de manera exhaustiva para adaptar la suspensión, el diferencial y otros aspectos a la conducción. La tracción 4×4 integral se puede desconectar del eje trasero cuando no se necesita para ahorrar energía (esto ocurre automáticamente cuando se superan los 35k/h) o conectarse cuando se detecta firme inestable o a altas velocidades para ganar seguridad.

El control de chasis integrado Dynamic Response Pro con su suspensión neumática de última generación, además de la tracción integral permanente, la cual permite una mayor maniobrabilidad en baja velocidad y giros de 360 grados en apenas 11 metros cuadrados gracias a su eje trasero direccional, algo sorprendente para un coche tan grande. Igualmente la suspensión neumática se ajustará automáticamente en función del terreno, la velocidad y otros factores. Por supuesto podemos configurar también manualmente dichos ajustes en el caso que queramos. A destacar también, sus nuevos faros de luz adaptativos, con más de un millón de espejos, son capaces de identificar a la vez 16 objetos, el doble de lo máximo que había hasta ahora en el mercado.

MECÁNICAS

Cinco son las opciones mecánicas que en principio se ofrecen para el nuevo Range Rover y para 2024 se espera la versión 100% eléctrica. En un primer escalón están los dos diésel D300 y D350, con un motor de seis cilindros y 3.0 litros, con 300 y 350 CV. En ambos casos van asociadas a un sistema de hibridación ligera.

En lo que a gasolina se refiere, debuta con el nuevo Range Rover un nuevo motor gasolina V8 de 4.4 litros y 530 CV, que acelera de 0 a 100 en 4,6 segundos. No lleva ningún tipo de hibridación y será la opción de los conductores de la vieja escuela. Ese es el modelo que estuvimos viendo y tocando en las instalaciones de Fiol Roca en Sevilla. Estas mecánicas serán las primeras en ponerse a la venta en el mercado español. 

A mediados de año llegarán las versiones híbridas enchufables de gasolina, los P440e y P510e. Ambos equipan un motor de seis cilindros aparejado a uno eléctrico y tienen potencias de 440 y 510 CV. En este caso sólo están disponibles con carrocería de longitud estándar a priori y su autonomía eléctrica será de 80 Km gracias a los 201 CV de su motor eléctrico. Estas versiones tienen tres modos de conducción: Hybrid -dos motores alternando-, EV -modo eléctrico- y Safe -recarga de la batería-. En todos los casos la caja de cambios es automática de ocho velocidades firmada por ZF y con convertidor de par, accionada mediante un pequeño selector.

Sus precios se mueven entre los 143.000 y 196.000 euros. Sus principales rivales en el mercado son el Rolls Royce Cullinan y el Bentley Bentayga, y en menor medida los BMW X7 o Mercedes Maybach GLS.

Si eres de Sevilla o alrededores, puedes ver el nuevo Ranger Rover en las Instalaciones de Fiol Roca y Classic Cars, concesionarios oficiales Lande Rover en la capital hispalense.