Parece que lo de Singapur fue un espejismo, porque nuevamente, Max Verstappen volvió por sus fueros con motivo del GP de Japón y regaló una victoria incontestable en el circuito que está a pocos metros de la casa de su motorista, Honda. La victoria de Max otorga ya a Red Bull el Título de Constructores. El holandés podría cantar el alirón en México si sigue así.

Sólo los McLaren de Norris y Piastri hicieron una pequeña intentona de impedir a Max pasearse a gusto por Suzuka en una buena salida, pero el bicampeón los resistió bien y desde entonces se dedicó a cimentar durante 53 vueltas una nueva victoria terminando a más de 20 segundos de Norris, segundo. El británico intercambió posición con su compañero australiano. Los coches papaya pudieron rodar cómodamente en posición de podio.

Fue cuarto Charles Leclerc. El Ferrari no fue tan bien como en Singapur, las curvas lentas de Suzuka no le sientan bien, pero sin duda hay mejoría en el coche de Maranello. Fue quinto Lewis Hamilton al realizar un undercut a Carlos Sainz, que protagonizó un duelo fabuloso con Russell que se llevó el madrileño. Russell se la jugó a una parada y no le fue bien, terminando séptimo.

Octava plaza para Alonso que protagonizó una salida magistral, pero el Aston Martin estuvo muy falto de ritmo. Los Alpine de Ocon y Gasly cerraron el top10.

Red Bull logra en Japón su sexto Título de Constructores. Parece una cifra modesta en comparación con otros equipos dada la juventud del conjunto energético, que lleva en el Mundial desde 2005. Pero como sigan así, pronto darán caza a muchos de esos históricos. Este año han logrado uno de los coches más dominadores de todos los tiempos, el RB19. Y el futuro que se les plantea por delante es apasionante.