Lección magistral de Verstappen sobre el diluvio de São Paulo
El GP de Brasil 2024 ejemplifica a la perfección por qué Max Verstappen es hoy por hoy el mejor piloto de F1. En un día en que las cosas no pintaban nada bien para él, saliendo desde el 17º, sumando una mala clasificación y una penalización, y con su inmediato rival, Lando Norris, en la pole. Parecía que a Max le tocaba sufrir.
La lluvia alteró por completo el ‘timing’ del GP de Brasil. La clasificación no pudo llevarse a cabo el sábado y finalmente se realizó a las prisas el domingo a primera hora. Con la carrera declarada en mojado, la primera en la frente para Lando Norris llegó con la salida después de haberse adjudicado gracias al espíritu de equipo de su compañero el sprint del sábado.
Russell le robó la cartera en la salida. Sorprendente rendimiento de los dos Alpine y de Tsunoda y Verstappen inició una remontada impresionante. La salida de pisa de Hulkenberg desplegó un coche de seguridad virtual y acto seguido la fía terminó desplegando el coche de seguridad ante un aumento de la lluvia que terminó con los coches en el pitlane y resalida.
Entonces los dos Alpine se vieron delante y con ritmo, pero era el día de Max y éste dio cuenta de ellos, demostrando por qué es el campeón y ganando con autoridad a la par que deja sentenciado el título toda vez que Norris sólo pudo ser sexto, de nuevo gracias a la benevolencia de Piastri.
Mal día para los pilotos españoles, que literalmente, se estrellaron.