Aún con un año de contrato en vigor, Honda Racing Corporation ha anunciado la salida de Marc Márquez de su box una vez haya finalizado la presente temporada. Piloto y fábrica efectúan su separación de mutuo acuerdo y ponen fin a una relación de 11 años juntos.

El comunicado explica que ambas partes llegan a este extremo toda vez que lo mejor para ambas es que busquen lo mejor para sí mismas por caminos separados. Seis Mundiales, cinco triples coronas, 59 victorias, 101 podios y 64 poles son los números de la relación entre Márquez y HRC. Desde que Márquez lograse en la temporada 2013 la victoria en el GP de EEUU en Texas, ese mismo año comenzaría su racha victoriosa, que se interrumpió en 2020.

Igualmente, en el documento, Márquez y HRC afirman que en lo que resta de la temporada seguirán trabajando juntos al máximo nivel para lograr los mejores resultados posibles.

Parecía imposible que Marc Márquez fuese a separar su futuro profesional de Honda, pero lo que empezó como una suposición se ha materializado. De este modo, el ocho veces campeón de Motociclismo tiene vía libre para unirse a un nuevo proyecto que a muy seguro va a ser enrolarse en las filas del equipo Gresini junto a su hermano Álex y disfrutar el próximo año de una Ducati como la que pilotan hoy Bagnaia, Bastianini, Martín y Zarco, o sea, en la temporada 2024 Márquez conduciría una Ducati Desmosedici de 2023, si es que se cumplen los pronósticos. No parece que sea un problema visto lo que está haciendo Marco Bezzecchi en la presenta temporada con la Ducati de 2022 o incluso el mismo Álex Márquez, que ha ganado una sprint este año.

En el caso del equipo HRC Repsol queda libre un hueco que si bien se antoja jugoso es a la vez bien complicado, pues el piloto que llegue deberá ponerse a trabajar con Joan Mir para que el equipo salga del agujero en que se encuentra. Sea como sea, la ‘Silly Season’ de MotoGP se agita pero bien con el divorcio Márquez-Honda.