La división deportiva y de productos especiales de Mercedes, AMG, no se están quietos a la hora de sorprender al personal. Hace poco lanzaban el súper exclusivo GT Black Series y ahora llegan y rizan el rizo con una versión del mismo aún más exclusiva, el Track Series, una tirada de limitada de 55 unidades que sólo podrá usarse en circuito. Esta desarrollado siguiendo toda la experiencia de la marca en las competiciones de GT3 y GT4 y viene a conmemorar el 55 aniversario de AMG, efeméride que la compañía con base en Affalterbach conmemora en la actualidad.

Motorizado por un bloque V8 sobrealimentado de 4.0 litros, eroga 734 CV y es el modelo custom más radical fabricado por Mercedes AMG, tanto que su uso está limitado a circuitos, ya sea en tandas o eventos privados. El motor transfiere la potencia a las ruedas traseras a través de una caja de cambios secuencial de seis velocidades a la que va acoplado, una transmisión firmada por el especialista Hewland, una referencia en la F1 y la alta competición. Tiene 14 CV más que el AMG Black Series de calle, el mismo coche que actualmente se utiliza en el Mundial de F1 como Coche de Seguridad.

Incorpora igualmente una suspensión deportiva regulable cuya autoría corresponde a la marca Blistein. El apartad aerodinámico es un fiel reflejo de la filosofía AMG. El capó, el alerón trasero, la tapa del maletero y otros elementos son de fibra de carbono, y todo ello hace que el peso del coche sea 1400 kilos. Tanto el alerón como la suspensión se ajustan según las necesidades del trazado.

El piloto se ve protegido gracias a una novedosa jaula anti vuelco y el sistema anti incendios. Todo esto tiene un precio, 369.000 euros.