El coche que protagonizó una de las persecuciones más célebres de la historia del cine, sino la que más, ha marcado un récord histórico. El Mustang Fastback GT 390 que conducía Steve McQueen en ‘Bullit’, una de las unidades empleadas, ha sido vendida recientemente en una subasta de la casa americana Mecum Auctions por cinco millones de dólares, convirtiéndose en el Mustang más caro de la historia.

Una de las peculiaridades de esta unidad es que se encuentra en estado original -apréciese en las fotos-, algo que sin duda le ha añadido un valor extra. Y es que según informó la empresa de subastas, apenas comenzó la puja ya se ofrecían dos millones de dólares por él.

Ahora, su afortunado propietario, un fan incondicional del ‘Rey del Cool’, podrá revivir las sensaciones de vivir la persecución más célebre de la historia del cine, cuando Steve McQueen en la cinta dirigida por Peter Yates persigue por las calles de San Francisco a un Dodge Charger RT negro -otro mito del automovilismo- al ritmo de la música de Lalo Schriffin y, por supuesto, de sus rugientes mecánicas V8.