DS y su histórica relación con los rallyes
Los DS de la escudería “Ecurie Paris”, dirigida por René Cotton y que después acabaría convirtiéndose en el equipo oficial del constructor, vencieron en todas las competiciones imaginables: desde el Rally Montecarlo (dos veces) a maratones como la Lieja-Sofía-Lieja, el East African Safari, el Rally de Córcega, el de San Remo, el Acrópolis, el de Alemania, el de Polonia, el de Noruega, el de los Mil Lagos… Sin olvidar el dificilísmo Rally de Marruecos en el que, primero el DS y después el SM, dejaron boquiabiertos a sus rivales en muchas ocasiones como en 1969, una edición en las que ocuparon las tres plazas del podio con los equipos Neyret-Terramorsi (DS coupé), Verrier-Murac (DS21) e Ogier-Veron, (DS21).
Los que se inscribieron el año siguiente buscando revancha acabaron decepcionados: los DS volvieron a hacer pleno de victorias, llevándose a cada los dos primeros puestos absolutos, con Neyret-Terramorsi a bordo del mismo DS 21 Coupé del año anterior, seguido de Bernard Consten en el DS 21, acompañado de un copiloto que acabaría haciendo historia: Jean Todt, actual Presidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA).
En 1971, el SM se sumó al DS en la escudería de rallies. Con la desaparición prematura del director deportivo René Cotton, el equipo pasaría a ser dirigido por su viuda, la fascinante Marléne Cotton, que se convertiría en la primera mujer en asumir este puesto en la escudería oficial de un gran constructor, con resultados destacados en las siguientes temporadas.
El SM pilotado por Jean Deschaseux con Jean Plessard como copiloto se impondría con maestría en la prueba marroquí. Una demostración evidente de la calidad y la robustez de un coupé sofisticado y tecnológicamente avanzado, que supera las pistas imposibles del Rally de Marruecos imponiéndose en una carrera que no tiene nada de sencillo.
En 1972, la escuadra de Marlène Cotton debería “conformarse” con el segundo puesto absoluto con el DS 23 de serie, tripulado por Neyret y Terramorsi.
Mientras tanto, los reglamentos empezaron a cambiar y los coches que compiten empiezan a no tener demasiado que ver con los que se pueden comprar en los concesionarios.
Sin embargo, el DS tendría aún bazas que jugar. En 1975, cuando la producción de este modelo había concluido algunos meses antes, el DS 23 de Jean Deschaseux y Jean Plessard terminó el Rally de Marruecos como primero en la categoría Turismos y cuarto en la Clasificación General.
Fue el último año en el que el DS y el SM fueron participaron en competiciones deportivas: el equipo oficial se suprimió a principios de 1975 y el DS 23 que corrió en Marruecos fue inscrito por una escudería local. Para el DS y el SM, fue un final a lo grande.
Además de competir con monoplazas de alta tecnología en la Formula E, DS Automobiles recoge el testigo de esta trayectoria de leyenda con el DS 3 CROSSBACK E-TENSE. Una unidad de serie, como las que se pueden ver en calles y carreteras ha participado en el prestigioso eRally de Montecarlo, la prueba más prestigiosa entre los rallies reservados a vehículos eléctricos, imponiéndose en la categoría “eficiencia” con el récord de 9,55 kWh/100 Km, una marca que no ha sido igualada en ninguna de las 12 pruebas de la temporada internacional.