“En ROYB Motor igualamos el trato entre el coche nuevo y el usado”
Con sedes en Villamartín y Arcos de la Frontera, ROYB Motor inicia su andadura en el año 1991 como servicio Seat. Tras la representación en todos estos años de la célebre firma española y la incorporación de Cupra, amén de otras marcas, también unen a su cartera de producto la firma china Omoda con su división Jaecco más lujosa. Toda esta actividad compaginada también con el Vehículo de Ocasión. Empresa de referencia en el sector de la distribución en la Comarca de la Sierra de Cádiz y en la Provincia en general, José Luis Rodríguez Bautista, su gerente, habla de la trayectoria de la mercantil durante estos años, de los retos futuros que afrontan y, por supuesto, del sector.
Háblenos de la trayectoria de su empresa…
Empezamos en 1991 en Villamartín con una nave de 550 metros. En 2005 nos mudamos al Polígono El Chaparral con más de 4.000 metros. Precisamente este año celebramos el 20 Aniversario de nuestras actuales instalaciones. En 2017 abrimos en Arcos. La verdad que estamos teniendo éxito y ahora estamos apostando mucho por un negocio cada vez más digital y tratamos de adaptarnos a esta circunstancia, que no es fácil.
¿Con qué marcas trabaja como concesionario y servicio?
Desde el año 91 representamos a Seat que es la marca que llevamos en el corazón, llevamos toda nuestra vida con ellos. A raíz de ello nos ha llegado Cupra asociada a Seat, una marca española nueva que se ha posicionado muy bien. Y lo de Omoda Jaecco coincide que les representan el Grupo Terry, pues nos la han ofrecido para Villamartín, Arcos y también en Sanlúcar de Barrameda, que será a través de un gran colaborador que tenemos.
Seat es una marca muy mayoritaria, con sus altibajos, pero seguimos vendiendo. Es cierto que vendemos más VO que VN, porque es la tendencia del mercado, por cada VN vendemos dos y pico usados.
Los concesionarios oficiales cada ve abrazan más el VO cuando antes lo delegaban a un tercero, ROYB Motor en su trayectoria viene compaginando ambas cosas desde una posición privilegiada desde sus inicios…
En los años 98 y 99 apostamos por el VO porque vimos un cambio de tendencia, ya no era todo el coche nuevo y el usado iba acomodándose en el mercado. Hicimos una importante apuesta por el VO, de hecho, en ROYB Motor igualamos el trato tanto en el coche nuevo como en el usado, o sea, hay concesionarios que el VO lo tratan como algo de segunda, incluso los relegan a una campa fuera de las instalaciones principales, no le dan la importancia que creo que debe tener. Al final, ya sea VO o VN, el cliente es el cliente y hay que darle el mismo trato.
¿Qué tipo de coche es el que más demanda tiene?
El SUV, y en nuestro caso con motor diésel. Pese a que la política nos quiera llevar por un sitio, la realidad va por otro totalmente opuesto. No es muy popular lo que digo, pero es lo que piensa todo el mundo que pasa por aquí. En 2024 hemos vendido 600 unidades y casi todos, diésel o de combustión. La gente no cree en el coche eléctrico todavía ni en el híbrido. Las ventas de eléctricos hoy día apenas alcanzan el siete por ciento.
Le pregunto entonces como empresario de la distribución del automóvil sobre esa electrificación que se quiere imponer en el parque móvil…
Hablo con muchos gerentes de muchas marcas. Me parece bárbaro -en el mal sentido- lo que se esta haciendo desde la política desde Europa. Y al final todo es en Europa, porque en el resto del mundo nadie implanta estas políticas tan tremendistas. Están imponiendo, y están llevando a muchos concesionarios a la ruina, porque les obligan a matricular coches eléctricos que luego no pueden vender. Es una imposición y veo que se están llevando muchas empresas buenas por delante.
La electrificación la veo a muy largo plazo, cuando el cliente y el producto estén preparados. Ahora mismo no puedes cobrar ocho o 10.000 euros más por un producto que empeora las características de los coches. Eso, comercialmente, no tiene lógica. No te puedo vender un coche más caro con prestaciones menores.
Luego está la financiación, algo que nadie menta y es lo más importante. Si ahora nos cuesta saca adelante una media de financiación de 15.000 euros, imagine de 23.000 o 24.000 euros. Hablamos de sacar a una familia normal ese dinero. Es muy difícil.
Y luego está la tecnología, lo que tarda un coche en cargar y los trayectos que recorre son todavía pequeños. Hay un cúmulo de cosas que se está obligando desde la política y todavía ni la tecnología ni el mercado está preparado para ello. Ni la infraestructura ni el público, por supuesto. Quizás en centro y norte de Europa vayan más adelantados por el mayor poder adquisitivo, porque con dinero las cosas son más fáciles. Pero en España no es el caso.
Ya ostentan en ROYB Motor la representación de uno de esos fabricantes chinos que llegan pisando fuerte en todos los sentidos, ¿qué opina de este desembarco de marcas chinas que vivimos en los últimos años?
Soy empresario, vendo coches. Me da igual vender chino, alemán o italiano. La verdad que este desembarco del que usted habla “la culpa” la tiene la propia política, porque nos hemos dedicado a comprar de todo a los chinos y ahora dependemos de ellos. Entonces se han puesto delante. Además, el coche europeo se ha puesto muy caro, por ejemplo, un Peugeot 208 o un Seat Ibiza, que antes valían 12.000 o 13.000 euros ya por menos de 15.000 o 16.000 no te lo compras y encima con motor gasolina.
El mercado europeo ha dejado un nicho vacío a los chinos. Ese nicho tiene un sector que necesita comprar un coche, pero a los precios que están los coches europeos no los compran. Llega el chino entonces dando el precio que dábamos antes nosotros y encima te da mejores prestaciones. Les estamos dando esa parte de la tarta a los chinos y la culpa es de Europa, no de los chinos, los chinos simplemente aprovechan.
Dada su trayectoria y experiencia con muchos coches, ¿qué sensación de calidad le transmiten estos nuevos productos de china?
Al empezar con Omoda, he probado el coche, lo he visto y te quedas gratamente sorprendido. Y las garantías están muy por encima de las europeas. Es un producto que está por probar, pero coches que están ya en 30 países, me cuesta pensar que no tengan calidad.
¿Es el caso de las marcas chinas el mismo que cuando llegaron Kia y Hyundai a España?
Recuerdo el complejo que hubo en su día de llevar un Kia o un Hyundai, pero esos complejos se están perdiendo o se han perdido. Sólo hay que ver el caso MG y la de coches que están vendiendo. Y no están dando problemas serios, dan los habituales, vamos, mire usted el Grupo Stellantis los problemas que están dando. Todos los coches dan algún problema. Y a los chinos les han dejado las puertas totalmente abiertas … ¿ahora quieren ponerles aranceles? Ya se llega tarde, el mal está hecho.
Y una cosa más, Omoda por ejemplo va a empezar a fabricar coches en Barcelona… ya van a ser europeos entonces.
¿Cuál es, a su juicio, la seña de identidad de ROYB Motor?
Siempre ha sido dar el mejor servicio al cliente y basarnos en la calidad, sobre todo en el VO, porque el nuevo es cosa de la marca, pero con el VO nuestra premisa es prepararlo muy bien para que no den problema. Y siempre dar un buen servicio al cliente. No lo olvidemos, estamos en una zona rural, más bien pobre, y vamos creciendo más porque cada vez vendemos más fuera. Velamos por la calidad y por el mejor servicio al cliente, al que acompañamos siempre, desde la elección del coche a la posventa.
¿Es fiel el cliente de ROYB Motor?
Yo tengo clientes que les vendo yo directamente el coche, porque se fian. Yo no bajo los coches del camión, los limpio y los pongo en exposición. Hacemos un reacondicionamiento. Obviamente en 600 coches que se venden surge algún problema, pero intentamos reacondicionar antes los coches. Tengo para ello a Juan Luis, un chico que viene de una empresa muy potente de Málaga. Y él cuando llegó aquí y vio nuestro sistema de trabajo se sorprendió. Él se había acostumbrado a bajar el coche del camión, venderlo y a torear los líos. Y yo prefiero ir más tranquilo. Y tengo hasta clientes de fuera que repiten, por ejemplo, una autoescuela de Barcelona que compró dos coches y luego los repuso.
Para terminar, ¿qué desafíos afronta ROYB Motor de cara al futuro?
Bueno, para empezar, vamos a tener un colaborar en Sanlúcar, una empresa muy buena y nueva, un chico que está empezando y va con la escuela de ROYB Motor. Seguro que va a funcionar en Sanlúcar.
Nosotros llevamos dos años con un lío -risas-, a mi siempre me gusta tener un lío en la cabeza. Estamos desarrollando nuestro propio sistema de franquicia y ya contamos con seis o siete franquiciados que apuestan por ROYB Motor. Nuestros mismos empleados tienen la oportunidad de entrar en la franquicia y entran en el negocio del automóvil sin negocio. Es un sistema de franquicia muy peculiar pero que está funcionando muy bien. Estamos muy contentos, desde ROYB Motor y los franquiciados, porque están ganando dinero.
¿Y cómo funciona ese sistema de franquicia de ROYB Motor?
Ellos utilizan toda la maquinaria de ROYB Motor, de compras, preparación, exposición, sistema virtual… todo es virtual. El franquiciado destina dinero para comprar coches y nosotros se lo gestionamos. Nos está funcionando muy bien el sistema y hemos crecido muchísimo en stock,. El que quiere entrar en la franquicia invierte una cantidad para 10 coches y les saca un dinero muy bueno y ni bancos ni nada. Empezamos hace dos años, pero ahora mismo estamos parados porque el crecimiento ha sido bestial y lo queremos controlar bien.. Cuando se les saque rendimiento al stock actual seguiremos creciendo. Pero con la franquicia tenemos un campo muy bonito para crecer. Al final hago que mis empleados tengan la oportunidad de ser empresarios también, por lo que se hacen parte de la empresa.