Dos claros ganadores en el GP de Bahrein 2020. Uno, el habitual, Lewis Hamilton, que lideró la carrera de principio a fin sin despeinarse, y Romain Grosjean, el cual sufrió un impresionante accidente que terminó con su coche partido en dos y totalmente calcinado. Las imágenes del francés saliendo de entre las llamas siendo rescatado por los oficiales daban auténtico pánico. Todo ocurrió en la salida, el piloto de Haas, con su habitual conducción agresiva tocó al Alpha Tauri de Kyvat se salió en la curva 3 del Circuito de Sakir y chocó contra los guardarráiles de forma violenta, partiéndose por la mitad y saliendo ardiendo de forma espectacular. Ello obligó a parar la carrera para volver a restablecer la normalidad. Grosjean salió por su propio pie ayudado por los comisarios y fue trasladado por el coche médico, pero en principio, no ha tenido nada grave.

La carrera fue relanzada casi hora y media después del accidente. Lewis Hamilton la ha liderado sin despeinarse. Parecía que Max Verstappen se acercaba en algunas ocasiones, pero más bien era un Hamilton que jugaba con él. Verstappen terminó segundo y con la vuelta rápida. Sergio Pérez fue sin duda otro de los hombres de la carrera, tras el relanzamiento pudo situarse tercero y demostró una vez más su clase, pero una rotura de motor a falta de dos vueltas le condenó al abandono. No obstante, gran trabajo de un piloto que pide a gritos ser subido el año que viene al segundo Red Bull.

Tercera plaza de rebote para un siempre insípido Alex Albon, que se ha beneficiado de la rotura del motor y retirada del piloto que en pista le ha superado sin problema. Y es que hoy era una de las veces en que se esperaba más del segundo Red Bull, con un Valteri Bottas totalmente fuera de tono y atrapado en el pelotón trasero, y sin coches fuertes que le pudieran molestar como los Renault o los McLaren. En fin, sea como sea, este podio de chiripa no debe ser motivo para dar continuidad al tailandés.

Lando Norris y Carlos Sainz han sido cuarto y quinto otorgando unos muy valiosos puntos a McLaren de cara al campeonato. Carlos ha hecho una carrera marca de la casa, impecable y demostrando la enorme clase que tiene. Lástima de errores ajenos a él cometidos por su equipo, como en la clasificación y una parada en boxes horrenda. Ojalá que el año que viene le vayan mucho mejor las cosas en Ferrari.

Y ya que hablamos de los de Maranello, parece que lo de Turquía fue un espejismo, pues otra vez se vio un coche sin velocidad ni mordiente, al que todos le pasaban por encima. Un décimo de Leclerc les otorga un punto, pero siempre por errores o bajas de los demás. Vettel ha sido 13º.

La carrera terminó en modo coche de seguridad por el abandono de Sergio Pérez. El otro gran incidente de este GP fue protagonizando por Stroll, cuyo coche volcó al poco tiempo del relanzamiento tras un toque… adivinen con quién… sí, Kyvat. La retirada de los dos coches de Racing Point les perjudica seriamente en el Mundial de Constructores.

Volviendo al accidente de Grosjean, el piloto francés afronta sus últimas carreras en F1 y afirmaba recientemente que quería aprovechar y divertirse. Lo cierto es que nada ha cambiado y sigue siendo un piloto cuya excesiva agresividad e impulsividad sigue provocando grandes siniestros. Habrá que ver cómo afecta su ausencia a esta dinámica la próxima temporada. Sobre todo, acuérdense de Spa 2012 y de Fernando Alonso.